Madelinne Nieto, la nueva legionaria catracha en Ecuador

En un giro inesperado para Madelinne Nieto, la talentosa guardameta de la selección nacional femenina, se ha sumado a las filas del Club Macaray de Ecuador, convirtiéndose así en la nueva legionaria catracha; su sorpresa ante esta oportunidad en el extranjero es palpable “No esperaba que llegara una oportunidad del extranjero tan rápido, aunque si se estaban buscando ofertas para jugar en el extranjero”.

Una contratación que llena de ilusión a la seleccionada nacional quien recientemente jugó la eliminatoria de la Copa Oro femenina y que nos comparte todas las sensaciones que le significan dar este paso “ fue de mucha alegría, un impacto muy grande sabiendo que como mujer en el país las oportunidades de esta naturaleza son más limitadas, pero al ser parte de la selección y sus competencias me ayudó bastante, se abrieron muchas puertas” así de emocionada ha respondido Nieto tras recibir la noticia  que la vincula al fútbol ecuatoriano.

Madelinne durante la entrevista se ha mostrado muy segura de si misma y es consciente que las oportunidades son parte de su talento, esfuerzo y constancia sin dejarse caer por las circunstancias adversas que pudo haber atravesado en esta difícil carrera de futbolista “se de mi talento, he trabajado mucho, trabajar más allá de nuestras posibilidades” manifestó.

La selección de Honduras su mejor vitrina

Por su propia cuenta Nieto buscó un agente o representante quien de inmediato le pidió videos de sus mejores partidos vistiendo la camisa nacional, básicamente fue una colección de sus partidos de la última eliminatoria de Honduras jugado a finales del año anterior.

Después de observar las imágenes de nieto bajo el marco, varios equipos internacionales se interesaron por hacerse de sus servicios, entre ellos dos equipos de Ecuador, pero se decidieron por Macaray siempre ese país suramericano.

“Estar en la selección no es fácil, como todos podrían pensar y es llevar un peso porque estás representando a tu país, con mucha gente, puede haber críticas, pero sabemos que el fútbol femenino está creciendo, somos el auge para esas niñas que vienen atrás de nosotras y estar en la selección les abrirá muchas puertas. Claro está que nadie te va a regalar nada, esto se trata de disciplina, entrenamientos fuera de los horarios oficiales” siguió diciendo Madelinne.

Conozcamos a Madelinne la persona

Se le han aguado los ojos a Madeline que hace una mirada retrospectiva a su etapa de niña y comienza a narrar esa época “desde que tengo conciencia he vivido en las canchas por mi hermano Joshua Nieto que jugó en la liga nacional en la selección de Honduras y desde aquellos días he transitado por el fútbol, en aquella cancha de las Vegas, ahí fui criada, jugando con hombres porque inicialmente no habían academias, fui entrenada por Edwin el “Venado” Castro hasta la categoría mosco, porque después de esta edad, por reglamento ya no podía jugar” dice muy triste la seleccionada nacional.

Sus inicios en la selección en una posición diferente a una cuidavallas

Su pasión por el fútbol la continuo en el colegio donde cursaba sus estudios y donde también le daban la oportunidad de jugar el deporte de sus amores; para la talentosa guardameta este fue uno de sus mejores momentos, porque es cuando recibe su primera oportunidad para vestir el uniforme de una selección nacional de la mano del profesor Luis Perdomo, en un equipo U-17 y lo más curioso de esta historia es que su posición no era de portera, sino de delantera “ Es cierto yo era delantera en el 2015 y realicé una prueba de selección en esta posición,  pero me vieron haciendo trabajos de portera y el profe Felipe Godoy me preguntó si quería ser portera, yo lo quería hacer era goles, fue muy difícil, pero hoy no me arrepiento”.

Estudios antes que el Nacional de Colombia

El talento de Madelinne la ha puesto en la órbita de clubes importantes del hemisferio, sin embargo la hondureña tiene muy claro sus prioridades que garantice su futuro aún fuera de un rectángulo de juego y que mejor que a través de una carrera universitaria, prioridad que la hizo renunciar a jugar en el prestigioso club Nacional de Colombia “muy interesante la propuesta de este club, pero me faltaba muy poco para culminar mis estudios y no podía quedarme a mitad del camino, debí decir no” una decisión que no le produce el más mínimo de arrepentimiento.

Graduación sin celebración, la H es primero

Una graduación suigéneris, si entendemos que para los jóvenes graduados no solo es lanzar el birrete sino que se venga la celebración con familia y amistadas, pues en el caso de la nueva licenciada en nutrición fue muy diferente, su mente estaba en Nicaragua porque su responsabilidad estaba con el equipo nacional que le necesitaba, así que la celebración podía esperar “me fui a Nicaragua porque tenía partido al día siguiente, hablé con mis padres y revisamos fechas porque no se definía el día de mi graduación, es ahí que me doy cuenta que el juego es justamente después de la graduación, uf! Queda marcado el momento de la juramentación flash, porque dos horas después pasaron por mi para el viaje, confieso que ese sacrificio lo hice por amor a la H, quería estar con la selección y representarlo” manifiesta Nieto con un rostro compungido.

Madelinne adulta a Madelinne niña

Sin duda el paso al fútbol internacional es un logro, es un sueño cumplido, aquel sueño que de niña tuvo despierta la guardameta catracha, que no deja de recordar sus episodios de una niña apasionada por el balompié desafiando las circunstancias de país hasta abrazar el éxito; al preguntar que le diría a esa niña no lo duda y manifiesta “le diría que no se rindiera, que todo lo que se hace siempre valdrá la pena, aguantar lluvia, sol, polvo, ese sacrificio será tu alegría, alegría que será siempre a nuestro país, mi familia.  

De niña discriminada a orgullosa representante del fútbol catracho                        

La carrera futbolística de Madelinne no ha sido un lecho de rosas, ha sido un camino espinoso, partiendo que de niña sufrió de la discriminación por jugar al fútbol, fueron sin duda tiempos difíciles que le fortalecieron y le formaron carácter, aunque ciertamente en medio de esa discriminación encontró ángeles en su camino, “Si me costó porque padecía de muchas críticas, sin embargo uno decide si rendirse o continuar y en lo personal nunca me limité, no fue un obstáculo, he sido siempre cabeza positiva en todo lo que he hecho, inclusive tuve entrenadores que me ponían a elegir entre mis estudios o el fútbol, por supuesto que siempre he estado enfocada en mis metas y aquí estoy agradecida con Dios por todo lo que me ha dado”.

Finalmente en la casa del fútbol hondureño pudimos extraer un mensaje de Madelinne a todas aquellas niñas que la ven como un modelo a seguir en el fútbol hondureño, para romper paradigmas y esquemas que les impulse a generar los cambios que ellas anhelan respondiendo “ Primero me alegra que la FENAFUTH esté trabajando en diferentes proyectos que impulsan el desarrollo del fútbol femenino como el TDS, fui testigo de ese alcance y observé en el Birichiche, compartiendo con ellas, noté en su rostro la alegría, creo que el mensaje para cada niña es que sigan sus sueños, que trabajen para ello, no es fácil, nadie les regalará nada, pero que también lo disfruten, disfruten el fútbol y que la oportunidad que ahora están teniendo con la federación con este tipo de proyectos lo aprovechen, son oportunidades que no llegan dos veces”.

Ahora como legionaria la cuida vallas hondureña deja sobre la mesa una promesa que se la toma muy en serio “Voy a representar no solo a mi persona, sino un país y daré el todo por el todo para elevar el nombre del fútbol femenino hondureño, que sepan que en Honduras si hay talento y no bajaré los brazos para crecer, y así que se sientan orgullosos de una legionaria en Ecuador.

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