Después de su arribo a Mendoza, sede de sus dos primeros partidos, la selección mundialista que dirige Luis Alvarado, espero apenas la hora del almuerzo para retomar el ritmo de su trabajo previo a su debut en el mundial frente a Gambia.
Y no era para menos su salida de tierras uruguayas comenzó en las horas tempranas de la mañana para abordar el vuelo que los traería a su última estación mundialista.
Así que, con su equipo de trabajo en mano, el preparador físico de la delegación catracha Ariel Bustamante, inició el trabajo regenerativo y de fuerza con los muchachos para tonificar y tener la adecuada recuperación producto de lo expuesto.
Oración y dedicación al Dios del cielo e inmediatamente a la acción.
“Entrada en calor, trabajos de zona media, pectorales y abdominales con rotaciones continuas, trabajando además el tren inferior y tren superior” se escucha al PF, en su primera intervención.
Se observa mucha armonía y atención en cada una de las indicaciones del Profe. Quien no deja un minuto de dar sus instrucciones
Seguidamente comienza la explicación de las diez estaciones que se han preparado para los ejercicios de fuerza y el fortalecimiento muscular Remo con pesas, trabajando los tríceps, haciendo énfasis en la prevención de aductores y todo lo que conlleva esa dinámica muy particular de Bustamante.
Las tareas físicas finalizan zambulléndose en la alberca del hotel, no con fines de entretenimiento, sino para continuar con el plan que se ha diseñado para este primer día de entrenamiento como muestran las gráficas de @fenafuthorg.
El entreno finalizó justo a las siete de la noche con la caída del sol en el horizonte y con la mente de los cipotes enfocados del papel que tienen en los próximos cuatro días.